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domingo, 28 de abril de 2013

Capítulo 21

¡Hola de nuevo chicos! :) Siento la tardanza, pero me quedé bloqueada y no sabía como escribir este cap. No me gustaba como quedaba, si supiérais la de veces que lo empece a escribir y lo borré... jaja Pero bueno, ya está terminado :3 Espero que os guste. Y como siempre, comentad si queréis.
Que la suerte esté siempre, siempre de vuestra parte, tributos.


Comenzamos a andar hacia nuestro refugio, la verdad es que de día no estábamos ni a 15 minutos de distancia, pero de noche era otra cosa.
Era increíble el cambio que daba la Arena por las noches, y aquella primera noche que pasamos despiertos en la Arena, lo comprobamos.

¿Habéis escuchado eso?-dijeron de repente Luna y Georgius parándose en seco.
No ha sonado nada chic...-empezó a decir Alsan para relajarlos. Pero entonces sonó más fuerte.

En la quietud del bosque se oía la respiración desacompasada de algo. Varios individuos, diría yo. Respiraciones sutiles, eso sí, pero respiraciones al fin y al cabo.

Sacad las armas...-dije en un susurro.- Rápido.
Pero antes de terminar esa palabra, las bestias salieron a nuestro encuentro. Tres seres grandes, más altos que nuestras cinturas, con granes garras y colmillos. ¿Qué son? No pueden ser naturales, esta claro... son mutos. Mutaciones hechas por el Capitolio para poblar nuestras peores pesadillas. Y lo tengo muy claro, nunca olvidaré a esos monstruos, ni sus miradas... ni el cuerpo que soltaron en el centro del circulo que hacían.

Oh Dios mio-digo, pero me falla la voz.

El cadáver que han soltado es el de una niña, supongo que uno de los tributos más pequeños, llena de desgarrones en sus ropas y en su cuerpo, desgarrones de uñas y dientes de aquellos seres. Pero aún así no dejo de fijarme en el arco que la chica lleva a la espalda, un arco demasiado grande para ella, y que sin embargo está intacto.

Las bestias se han quedado paralizadas, creo que no nos han visto, pues están un poco alejadas de nosotros y centradas en su presa.

Puedo coger el arco.-dice Luna.- Con él Alsan podrá matar a todos esos bichos.
No Luna, no vamos a arriesgarnos a eso.-dice Sirius.
¡Georgius!-grita Luna. Le tapo corriendo la boca y la sujeto para que no vaya trás él.
Georgius está detrás de las bestias, intentando arrebatar el arco y las flechas del cuerpo de la chica. Y lo consigue, pero no pasa desapercibido. Uno de esos monstruos se gira y lo ve.

¡GEORGIUS CORRE!-grita Luna desesperada, mientras se lanza hacia donde está él con su cuchillo por delante.
¡No podemos dejarles ahí!-grito yo a Alsan y Sirius, Alsan apunta una flecha con su ballesta entre los ojos del animal, y acierta de lleno. Pero aún quedan dos más, que con el jaleo que hemos montado, se han vuelto hacia nosotros.

Una de esas bestias comienza a correr tras Georgius y en apenas un instante, lo tiene entre sus garras.

¡Corred chicos!-grita el pequeño tirándonos el arco y sacando un cuchillo para luchar.-¡No os quedéis por mí! ¡No permitiré que muráis por salvarme!

¡No te dejaré!-grita Luna mientras recoge el arco e intenta apuntar a esos seres, pero el arco es demasiado grande para ella.

Georgius está rodeado, y empiezan a aparecer más bestias.
¡Hiud!-nos grita una última vez.

Y esta vez, le hago caso. Sirius y yo corremos hacia Luna, que ha soltado el arco y se dispone a socorrer a Georgius, pero la atrapamos antes, y mientras recojo el arco y salgo corriendo de vuelta con Alsan, que acaba de disparar a otra bestia que nos perseguía; Sirius coje a Luna sobre los hombro y se la lleva de allí, mientras la chica lucha por soltarse.

Y corriendo, huyendo de esas bestias, intentando llegar a nuestro refugio, aunque nos duela a todos, oyendo los gritos de Georgius mientras lucha por su vida, sin éxito, escapamos de allí.
Y no paramos de correr hasta estar otra vez en lo alto de los árboles.

Lo siento Luna-dice Sirius soltándola en una rama- Pero no podíamos hacer nada. Hubiéramos muerto todos.
Lo sé... pero...-dice la pequeña, pero no puede continuar la frase y empieza a llorar.
La abrazo con cuidado y me quedo allí abrazándola, mientras Alsan y Sirius hablan detrás nuestra.

Quedémonos aquí hasta el amanecer, cuando esto sea más seguro, nos iremos.-dice Alsan.
¿Estáis alguna herida?-pregunta Sirius.

Me separo de Luna para decirle que no, pero veo como sí estamos heridas. Luna tiene una herida en la pierna.
Un corte, no muy profundo, pero que puede complicarse.
¿Cómo te has hecho eso Luna?-le pregunto, si no sé con qué ha sido, no sé como curarla.
Creo que no han sido esos animales...-dice la pequeña, claramente mareada, por la pérdida de sangre y la muerte de su compañero.- creo que fue con alguna espina, alguna púa... Me arañé con algo al recoger el arco, no sé si era una flecha, una cuchilla o algo natural...
Aquí lo único natural que hay somos las personas, Luna-le dice Alsan, acercándose y ayudándome a curarla.
La curo como mejor puedo, poniéndole una especie de crema que tenía preparada, un mejunje de varias plantas que creo que le ayudará. O eso espero.
Sirius coge a la pequeña en brazos y la lleva hasta el saco que pusimos antes. Y nada más tumbarla, se queda dormida, con las lágrimas aún en los ojos.

Sirius hará la primera guardia. Así que Alsan saca de su mochila su saco de dormir.

Alsan... ¿puedo tumbarme contigo esta noche?-le digo acercándome a él. No voy a ser capaz de dormir yo sola.
Esta y todas las noches que quieras- me dice haciendo un hueco a su lado.

Y me tumbo a su lado, apoyo mi cabeza en su pecho y le abrazo. Necesito saber que está aquí, necesito algo a lo que aferrarme.
En un día me he dado cuenta, cuando todo parecía ir un poco mejor, de que no. que no está mejor. Y tengo el presentimiento, de que nada va a ir mejor.

Te amo Ariadna.-me dice Sirius flojito- Y siempre lo haré. Siempre estaré contigo.
Yo también te amo.-le digo en un susurro
Prométeme que si ganas-continúa Alsan- serás feliz. Y vivirás tu vida sin mi.
No puedo prometerte eso.-digo incorporándome y mirándole a los ojos.- Nunca podré vivir sin ti.
Le beso una vez más. Y cuando vuelvo a tumbarme para dormirme, tengo lágrimas en los ojos, porque sé que lo que he dicho es verdad. Y que si Alsan muere, yo no podré vivir.

2 comentarios:

  1. Que bonito! Me encanta el final *-*
    Peeero, oye, esto es un blog de los juegos del hambre, mi opinion es qe deberias de quitar el fondo y poner... yo que se, otra cosa relacionada con LJDH, no??
    y te sugiero tambien que, cuando un personaje vaya a hablar, le pongas un guión, sino, no parece que sea una conversacion
    saludos.

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    Respuestas
    1. Gracias :3 Pues sí si tienes razon en las dos cosas, pero al final siempre se me olvida lo de los guiones, emepzare a hacer eso :3 Y lo del fondo, es que quiero buscar alguno que tambien tengo un poco que ver con el titulo, así que estoy buscando uno :)

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