PD: Espero dejr el capítulo a la altura del anterior,ya que lo habéis comentado bastante. ¿Qué os parece la pareja entre Alsan y Ariadna? ¿Os la veíais venir? Contestad a estas preguntas en los comentarios, si quereis :)
Lo
primero que veo al abrir los ojos, es a Alsan, dormido. Dormido está
incluso más guapo. Entonces me doy cuenta, de que tenemos las manos
cogidas. Recuerdo todo lo que pasó anoche y sonrío. Miro por la
ventana, está amaneciendo, supongo que debería levantarme e ir a mi
habitación. No me parece bien que nos vean así. No todavía.
He,
Alsan.-susurro.
Alsan
abre los ojos y sonríe.
Hola,-dice,
sigue sonriendo.-¿Ya es hora de levantarse?
Creo
que no. -digo un poco apenada- Está amaneciendo, pero creo que
deberíamos ir a nuestras habitaciones, y que el resto nos encuentre
allí.- Alsan me mira de forma rara, normal, le estoy diciendo que no
quiero que sepan que nos queremos.- No creo estar preparada para que
lo sepan, Alsan, para ver la pena en sus ojos al saber que vamos a la
Arena así.
Alsan
asiente y se levanta. Me tiende la mano y sonríe de nuevo. Colocamos
los pufs en sus sitios y nos dirigimos a nuestras habitaciones, sin
soltarnos de la mano.
Cuando
llegamos a mi puerta, tenemos que separarnos, y cuando Alsan se gira
para entrar en su cuarto, no soy capaz de soltar su mano. Se gira
hacia mí.
He,
no te preocupes -me dice agarrándome más fuerte la mano- no me voy
a ir, no va a pasar nada.
En
ese momento me besa. Tengo que ponerme de puntillas para poder
alcanzarle. Alsan sonríe mientras me besa, supongo que por ese gesto
mío y cuando nos separamos, esta vez sí, le dejo marchar a su
cuarto.
Me
tumbo en la cama, que está desecha de cuando anoche me acosté en
ella.
Pero
no soy capaz de dormir y acabo pensando en Alsan, en Alsan y en todos
los momentos juntos, y en los momentos aquí, en el Capitolio. ¿Quién
diría que mi primer beso sería en el Capitolio, la noche antes de
una posible muerte, y con Alsan?
Entonces,
me viene a la mente que dirán mis padres cuando me vean en los
Juegos con Alsan. Supongo que no les parecerá muy mal, sobre todo
porque conocen a Alsan. ¿Y Henri? ¿Se alegrará? Creo que sí, más
de una vez me ha dicho que Alsan sería un buen novio para mí,
aunque lo decía de cachondeo. ¿Y Shail? ¿Qué diría él de que
salga con su mejor amigo? Eso no lo veo tan seguro. Miro su anillo y
me lo llevo a los labios en un pequeño beso, mientras cierro los
ojos. Y veo a Shail sonreír. Sí, creo que se alegraría por mí,
por Alsan, por nosotros.
Al
cabo de una media hora, el Sol todavía está bajo, acaba de
amanecer, llaman a la puerta.
Ariadna,
¿estas despierta?-dice Samantha asomándose por la puerta.
Sí,
pasa.-digo incorporándome.
Samantha
me da una sencilla túnica blanca, y me lleva al tejado, dónde nos
espera un aerodeslizador.
Desde
el aerodeslizador baja una escalera, Samanth dice que suba yo
primero. Cuando subo, una corriente eléctrica me para, al llevar
arriba (la escalera sube sola), me pinchan en el brazo. El pinchazo
es doloroso.
Es
un dispositivo de seguimiento-me dice la mujer que me lo ha puesto-,
no te preocupes.
Después
de eso, sube Samantha y el aerodeslizador sale volando. Un avox nos
conduce a una sala con el desayuno servido, y aunque no tengo hambre,
trato de comer para coger fuerzas. El día de hoy va a ser duro.
Después
de unos minutos, el aerodeslizador para y bajamos a una especie de
sótano. Nos conducen a una habitación dónde tengo que esperar
hasta que llamen a los tributos para los Juegos.
Allí
está preparada la ropa que me tengo que poner para los Juegos: una
camiseta de manga corta, unos pantalones ajustados y unas botas de
cuero, todo en tonos marrones-verdosos. Y por encima una chaqueta de
un tono marrón bastante indefinido.
¿Qué
te parece?-le pregunto a Samantha una vez que termino de vestirme.
Pues...-contesta
ella, mientras toca las prendas- Las botas son de cuero bueno,
supongo que tendrás que dar duras caminatas, los pantalones guardan
bien el calor, y la camiseta de manga corta sugieren que no serán
temperaturas muy frías. Y la chaqueta... mmmm... parece de material
impermeable, seguro que lloverá, pero también es de un material que
guarda bien el calor.-calla un momento y dice como conclusión- Un
ambiente un poco raro, pero no te preocupes.-me sonríe.
Me
siento en una silla que hay allí.
Ariadna
-dice Samantha mientras se sienta en frente mía- Sabes que estoy de
tu parte, ¿no?
Sí-le
contesto, pero un poco triste.
¿Qué
te pasa niña?-me dice- Estas triste.
No
es solo que...-contesto, pero prefiero decirle la verdad- Bueno, sí,
es solo que... -respiro hondo y los suelto todo- Cuando llegué aquí,
venía dispuesta a odiar a todos los del Capitolio por hacerme esto,
por condenarme a mí, a mi familia, a Alsan, a todos los Distritos,
año tras año; y después de estar aquí, con vosotros... No soy
capaz de odiaros a ninguno, no quiero odiaros.
No
todo es lo que parece, Ariadna. -contesta Samantha con una sonrisa
triste- El Presidente nos vende que los Distritos sois gente
estúpida, rural, anticuados... Y no es verdad.
Pero
no entiendo -continúo- como hay gente tan mala que decide esta
masacre... Y gente buena como tú, Orión, Tiberius o Nooria.
Samantha
sonríe y dice:
Todos
tenemos luz y oscuridad en nuestro interior, pero decidimos que parte
potenciar. ¿Me entiendes?
Creo
que sí -sonríe yo también- No todo es o blanco o negro, ¿verdad?
Exacto,
niña.-dice Samantha, parece que quiere decir algo más, pero la
interrumpen.
Llaman
a la puerta.
Entra
un hombre muy serio que dice:
Señorita
Samantha, ¿podría dejar un momento la sala? El Presidente quiere
hablar con la señorita Silver.
Oh.
Dios. Mío. ¿Qué he hecho ahora? ¿Por qué quiere el Presidente
Snow hablar conmigo?
Samantha
se levanta, me da un abrazo y me susurra: Estoy contigo, todos lo
estamos, se fuerte. Te queremos Ariadna.
Ella
se va, y entra el Presidente Snow. Va vestido con un traje blanco que
hace honor a su apellido.
Se
sienta donde estaba Samantha.
Bueno,
Ariadna, ¿puedo llamarte así, no?-dice, y empieza a reír- Quita
esa cara de miedo, chiquilla, no voy a hacerte nada, solo quiero
hablar contigo.
¿Y
de qué quiere hablar?-consigo decir.
De
una cosa que las cámaras de vigilancia del edificio de tributos
vieron anoche.-dice sonriendo aún.
Oh
no, lo vieron todo. Todo lo que pasó entre Alsan y yo.
No
consigo decir nada, así que Snow sigue hablando.
A
mí, personalmente, no me parece mal el amor, incluso creo que es
algo bueno. -dice un poco más serio- ¿Qué sería de este mundo sin
amor? Pero mis consejeros no opinan lo mismo.
¿Y
qué quiere que haga?-le interrumpo- Estoy enamorada de Alsan, estoy
enamorada de mi compañero de Distrito. ¿Acaso eso es un crimen?
Para
nada, chiquilla -me dice Snow sin perder la calma- Es una pena que
solo uno pueda salir con vida de esto, una pena... Sé que Alsan
estaría dispuesto a morir por ti... Una lástima que un amor
adolescente muera así, ¿no?-en esto que se levanta y se dirige a la
puerta- Una lástima que solo uno pueda salir con vida,
oficialmente...-abre la puerta y se va.
¿Qué
ha querido decir con eso?¿Oficialmente?
Todos
los tributos a los ascensores, por favor.-dice una voz desde el
altavoz.
Samantha
entra en la habitación, y me despido de ella otra vez.
Entro
en el ascensor, que tarda un poco en subir.
Cuando
llego al aire libre, quedo asombrada.
La
Arena es un gigantesco bosque, con la Cornucopia (un cuerno de oro en
el que están los objetos que los vigilantes han puesto para
nosotros) en el centro, y nosotros alrededor.
Busco
con la mirada a Sirius, que está a tres tributos míos. Busco a los
demás, Prue está a dos tributos de mí, en el otro lado de Sirius.
Ella me mira a mí y luego a Josh, asiento. Quiere que le sigamos.
Entendido.
El
otro día quedamos en una estratégia: cogeríamos alguna bolsa cada
uno, si podíamos, y nos iríamos corriendo. Esta visto que siguiendo
a Josh.
Señoras
y señores,- dice la voz de Claudius Templesmith- ¡que empiecen los
primeros Juegos del Hambre!
LOOOOL *-* Muerte al snow y su familia!!! e___è conque un bosque... jummm :3
ResponderEliminarJajaja¿Tan mal te cae este Snow? ¿No ha echo nada malo, todavia...?
EliminarMe E-N-C-A-N-T-O! Está chulísimo a pesar de que lo hiciste, como me has dicho, corriendo <3 Y anda que no saber que era Samantha... ¡Debería haberlo adivinado!
ResponderEliminarPD. Espero el siguiente cap y... ¡Me gusta la parejita! Se los veía venir, en serio :3
Muchas gracias Lottie ;) Si que deberías haber sabido que era Samantha, sobre todo porque te lo dije un día... Jajaja
EliminarSí, fallo mío e.e
Eliminar